¿Recuerdas cuando te
llamaba y te decía para vernos, aunque sea un ratito, a las doce y media de la
noche? ¿Recuerdas cuando te decía te quiero, mil veces, y te mordía la oreja y
te susurraba en el cuello? ¿Recuerdas cuando entrelazábamos los dedos cuando te
abrazaba y te decía que tenía frío y metía mis flacuchentas manos en el
bolsillo de tu chompa? ¿Recuerdas cuando me mordías el cuello? ¿Y, cuando me decías
con voz de niña engreída: te quiero, mil veces, gordo, te quiero?
¿Recuerdas mis
berrinches cuando chateábamos? ¿Recuerdas tu cara de molesta cuando te bromeaba
con cuanta mujer pasaba por la acera? ¿Y cuando la miraba? Me miraban… yo no
miraba a nadie, sólo a ti. ¿Y, recuerdas, cuando te miraba, y te decía: por ti
estoy feliz, soy feliz? ¿Recuerdas cuando te decía que contigo era feliz y me
hacías la vida contenta? ¿Y los días y las noches, y el cielo y el mar no eran
nada sino estabas tú? ¿Recuerdas cuando te llamé, cierta noche, cuando caminaba
por el Malecón para pensar las cosas? ¿Tú has pensando bien las cosas? ¿Sigo
teniendo la culpa? ¿Sigo pensando y no hago nada?
¿Recuerdas que te dije
que no teníamos fotos juntos? ¿Recuerdas la foto en Miraflores, después de la
salida en grupo? ¿Y Joan: Ven, mierda… hablen, ya, carajo…? ¿Se notaba mi
felicidad? ¿Mi nerviosismo? ¿Te abracé fuerte? ¿Te estrujé el corazón?
¿Recuerdas cuando se me
hacía difícil decirte que quería que seas mi novia? ¿Cuánto me demoré? ¿Poco?
¿Mucho? ¿Recuerdas la esquina donde esperábamos el carro que me llevaba a mi
casa? ¿Nidito de amor? ¿Me voy ahí… No, no, en el otro… y así una hora
esperando el carrito de rayas celestes y blancas? ¿Recuerdas los golpes en la
frente, y los insultos de cariño? Te digo imbécil de cariño, gorrrrdito ¿ya?
¿Recuerdas a los noctámbulos? ¿A los que esperaban el carro con nosotros? ¿Y
los que tenían la pinta de no esperar el carro sino cualquier estúpido que
tenga una buena prenda o reloj o billetera gruesa? ¿Recuerdas mi cara de
pelinco? ¿Y tu cara de miedosa? ¿Y mis palabras? ¿Y mis abrazos en plena noche
calurosa? ¿Tus miradas?… aún las siento en las noches que camino solo, fumando
el cigarrillo que nunca se termina…
¿Recuerdas cuando
caminábamos lento? ¿Cuando te dije vamos para la Brasil, y nos estábamos yendo
para la Católica? ¿Recuerdas mi cara de vergüenza? ¿Y de enamorado? ¿Recuerdas
mi cara de templado? ¿Recuerdas cuando hablé con tu papá? ¿Y tú mamá: mírala a
los ojos…? ¿Recuerdas la película que veía tu papá y me dijo para verla juntos?
¿En blanco y negro, en su habitación, en silencio? ¿Muy divertida? ¿Por eso nos
fuimos a jugar ludo?
¿Recuerdas mis ojos
cuando te veían? ¿Y mi corazón palpitando? ¿Recuerdas mis besos alocados? Pues,
déjame decirte, que yo los recuerdo y los extraño.
¿Recuerdas cuando
caminábamos de la mano? ¿Cuando te agarraba más fuerte? ¿Cuando no te soltaba,
para nada? ¿Recuerdas cuando te besaba la mano, el brazo y el hombro?
¿Recuerdas cuando me mordías el hombro, y el omóplato? ¿Recuerdas los besos
prohibidos en el ascensor? ¿Los besos robados…? ¿Recuerdas cuando nos quedamos
dormidos en el sofá de tu casa, cuando Perú perdió en el Sudamericano Sub20? Me
intereso más contemplar tu cara que el partido… Que el equipo local… ¿Si me
hacías feliz? ¿Si fui feliz? Sí… fui feliz… y ahora también estoy feliz porque
te escribo… Y ahora también soy feliz porque me he sentado a escribirte seiscientas
palabras sólo para volver a sentir lo que sentía al estar contigo, caminar
contigo, reír contigo, ser feliz… contigo.